domingo, 28 de octubre de 2012

LA CABAÑA DIVERTIDA




La mayoría de los juegos están basados en entrenar la atención y discriminación, aspectos muy importantes para trabajar en estas edades. Es importante saber que en los primeros años de vida, los niños tienen una percepción global de lo que ven, y en ocasiones les cuesta localizar los detalles. En otras ocasiones se centran en el aspecto más llamativo, desechando lo que ven alrededor, es por eso que es importante ejercitar la atención y la concentración, ya que con este tipo de ejercicios, juegos, estimulamos el desarrollo cerebral.
Como siempre solo tenéis que pinchar sobre la imagen y..... ¡A JUGAR!

viernes, 5 de octubre de 2012

ESCUELA DE PADRES Y MADRES: LA RESPONSABILIDAD

ALGUNAS IDEAS PARA EDUCAR LA RESPONSABILIDAD EN LOS NIÑOS

Enseñar a tomar decisiones y establecer límites de actuación


La responsabilidad es uno de los valores o virtudes humanas más importantes en la educación de la personalidad. Uno de los objetivos principales que debemos plantearnos los padres es que nuestros hijos vayan integrándose en los diversos ámbitos de la vida conociendo sus deberes hacia los demás y hacia sí mismo, dando paso a una madurez y responsabilidad progresivas. Tenerlo en cuenta desde el principio puede evitar en el futuro situaciones de dependencia, inmadurez social e inseguridad.

Aprender a tomar decisiones
Ser responsable no sólo es cumplir debidamente lo que se manda. Eso sería mera obediencia, pero ser responsable es algo más, es saber elegir y decidir por uno mismo, con eficacia, en aquello que es propio del nivel de madurez o experiencia que se tiene.
Aprender a tomar decisiones le ayudará a resolver sus necesidades y las de los demás. Hay que dar oportunidades, desde muy temprano, para que el niño elija juegos, ropa, qué libro quiere que se le lea, qué desea merendar, etc. Una vez hecha la elección, la debe llevar hasta el final y no se le deben permitir conductas caprichosas. Tiene que experimentar las consecuencias de una elección equivocada. Por ejemplo: aburrimiento, cansancio, malestar, etc. Esta lección le servirá para ser más reflexivo y valorar aspectos positivos y negativos de lo que vaya a elegir.

A veces, la indecisión puede ser una forma de irresponsabilidad. Es dejar la carga para que otros resuelvan lo que uno no se atreve o no quiere hacer. En los niños pequeños es normal y frecuente que no decidan nada, aunque deberían presentárseles ocasiones para hacerlo. Al principio habrá que enseñarles dándoles dos posibilidades: ¿Qué quieres para merendar: chorizo o mortadela? ¿Qué jersey quieres ponerte, el rojo o el azul?
Después se puede pasar a presentarle tres o más alternativas y, cuando elija, debe explicar el porqué de su decisión. Pedir que se razonen las decisiones es el modo de enseñar a no obrar de un modo caprichoso o impulsivo. Un niño decidido será capaz de afrontar riesgos, siempre que no obre de modo impulsivo.
Es bueno que los padres pidan sugerencias a los hijos para resolver alguna situación problemática cotidiana. Es muy importante que vayan participando en otras decisiones familiares mientras observan cómo los padres sopesan las ventajas e inconvenientes.
Suele ser algo frecuente que los niños pregunten: "¿Qué hago?" y una vez que obtienen una respuesta, la rechacen. Es un modo de llamar la atención del adulto o una incapacidad para afrontar decisiones.
Cuando el niño tiene poca confianza en sí mismo deberemos ayudarle proponiéndole elecciones que supongan poco riesgo y ayudándole con pautas que faciliten su elección: ¿Qué prefieres llevar a la plaza: el balón o la bici? ¿Qué ponemos de postre: manzana o yogur? e ir aumentando el grado de relevancia de las cuestiones que se les plantean.

Pautas para enseñar a decidir
Para ayudar a un hijo a tomar decisiones podrían seguirse estos pasos:
  1. Enseñar a aceptar una sola posibilidad gustosamente, con una visión positiva. "Hoy tenemos visita y no podrás ver los dibujos animados de la tele, pero lo pasarás muy bien jugando con tus primos".
  2. Enseñar a elegir entre pocas posibilidades. "Vamos al parque. ¿Qué cogemos, la bici o los patines?"
  3. Ampliar el número de posibilidades de elección. A partir de los diez años se les pueden presentar diversas opciones. Por ejemplo, elegir entre las posibilidades que presenta el colegio de actividades extraescolares, etc.
  4. Animar a los hijos a que hagan propuestas que, posteriormente, se valorarán de forma constructiva.
  5. Enseñar a tolerar cambios imprevistos y que suponen una alteración de su plan tras una decisión tomada.
Dos observaciones:
- Deben valorar los aspectos positivos y negativos de cada alternativa.
- Una vez hecha la elección, deben afrontar las consecuencias positivas o negativas, sin echar la culpa a otros en caso de que no sean satisfactorias.


JUZGAD VOSOTRAS MISMAS

Pues lo dicho, aquí tenéis algunos de los trabajitos de esta semana....


¡Como habéis podido ver NO os mentía cuando decía que los resultado de la evaluación inicial son muy satisfactorios!